jueves, 30 de mayo de 2019

Como evitar el aumento de las Dioptrías


La miopía es una afección de la vista que provoca que debido a un fallo de refracción, los objetos lejanos se vean borrosos, mientras que los que tenemos cerca se sigan visualizando correctamente. Aunque la miopía suele aparecer a cualquier edad, lo más frecuente es que se desarrolle entre los 10 y los 23 años.


Los avances tecnológicos y el aumento de las horas que pasa la población delante de dispositivos electrónicos han provocado que la incidencia de la miopía aumente, por lo que los expertos señalan que el cuidado de los ojos es fundamental para frenar la evolución de las patologías oculares.

Como norma general es recomendable que cualquier persona revise su visión al menos cada dos años. Además, en el caso de una persona que empieza a ser miope, estas revisiones deberían ser más frecuentes, especialmente entre la niñez y hasta pasados los 20 años.

El 95 por ciento de la población dice que es el sentido que más teme perder. Sin embargo, sólo el 40 por ciento de la población realiza sus revisiones anuales.

A partir de las 4 o 5 dioptrías la gente debe acudir al oftalmólogo para evaluar el estado general del ojo y, especialmente, de la retina.

Respecto a las técnicas que podrían reducir el aumento de miopía. Existen varias que van desde el desde el entrenamiento del sistema visual (terapia visual) hasta lentes de contacto que logran detener su avance en muchos pacientes.


La prevención es la clave:

La regla 20-20-20: Cuando se está trabajando ante una pantalla es imprescindible que cada 20 minutos se realice un descanso de 20 segundos mirando algún objeto a 20 pies (unos 5 o 6 metros).

Más tiempo al aire libre: los niños deben pasar horas al aire libre durante todo el año. Además, tanto niños como adultos deben proteger su visión de los rayos solares.

Por último, en términos generales, todo el mundo puede cuidar su visión controlando su posición al sentarse y al leer, así como la luz que recibe.

Con información de… https://bit.ly/2WZmiEi

lunes, 27 de mayo de 2019

Las Cejas y las pestañas


Es habitual que, sobre todo las mujeres, presten especial atención al cuidado de cejas y pestañas porque son factores que pueden potenciar la mirada y aportar un extra de belleza al rostro.

Las pestañas postizas y los productos que las fortalecen y las alargan son cada vez más habituales en los baños y tocadores y se están multiplicando los centros que ofrecen diferentes técnicas para depilar las cejas. Sin embargo, las cejas y pestañas son algo más que un elemento estético y están ahí porque cumplen unas funciones muy importantes.


Las cejas, que se ubican a nivel de los arcos supraciliares del macizo facial a unos dos centímetros por encima de los ojos, ayudan a proteger los ojos del sudor que cae de la frente a la vez que evitan, en la medida de lo posible, la entrada de polvo y otros agentes externos a los ojos y reducen la intensidad de la radiación solar.

En el caso de las pestañas, su función es muy similar a la de las cejas, pero protegen los ojos “más de cerca”. Nacen en los bordes de los párpados y protegen al ojo de la entrada de bacterias y demás agentes externos. En este caso, la función frente al sol es todavía más importante que en el caso de las cejas porque filtran la radiación y sin ellas los ojos sufrirían irritaciones de forma constante.


Tanto las cejas como las pestañas presentan una estructura muy parecida a la del cabello. Parten de los folículos y están formadas de escamas de queratina, sustancia que les aporta fortaleza y flexibilidad. Sus folículos crecen (aunque muy lentamente), pasan por un periodo de maduración y se caen, exactamente igual que lo hace el cabello. Sin embargo, la fase de crecimiento de las pestañas y las cejas no se prolonga en el tiempo de la misma forma que lo hace el cabello, de ahí que no adquieran tanta longitud como el pelo de la cabeza.

En el caso de las pestañas, cuando se caen tardan unas 10 semanas en volver a salir y a desarrollarse, y suelen tener una vida de unos cinco meses. En el párpado superior, podemos tener unas 200 pestañas, mientras que en el inferior hay unas 80.

En lo que afecta a las cejas, el proceso de crecimiento dura aproximadamente un mes y su longitud no suele superar los dos centímetros.

Información de… https://bit.ly/2VHWGu8

martes, 21 de mayo de 2019

Cómo afecta la contaminación a los ojos


Es uno de los factores de riesgo ambientales del ojo seco, además de poder causar irritación e inflamación de la superficie ocular, como queratitis o conjuntivitis.

El ojo seco, que afecta a alrededor del 30% de la población, es una patología que va al alza en la sociedad actual y en la que influyen diferentes hábitos (como la alimentación o el uso de pantallas) y factores ambientales, entre ellos, la contaminación.


La polución del aire es un problema en aumento y de impacto global que, según la OMS, afecta al entorno de 9 de cada 10 personas en el mundo, con importantes consecuencias para la salud.

Y es que la superficie ocular está constantemente expuesta al exterior, por lo que no es inmune a los componentes tóxicos que están presentes en ambientes contaminados.

Una de las primeras afectadas es la película lagrimal que nutre y protege el ojo y que parece ver alterada su composición, lo que empeora la calidad y la estabilidad de la lágrima y repercute en la inflamación de la superficie ocular, propiciando el síndrome del ojo seco.

Algunos de los síntomas típicos que produce y que pueden agravarse en entornos con mucha polución son enrojecimiento ocular, sensación de cuerpo extraño, picor, cansancio en los ojos, lagrimeo, fotofobia o visión fluctuante, además de causar molestias oculares y problemas visuales, es importante recordar que el ojo seco también provoca lesiones corneales y conjuntivales.


Dado que solo una fina capa de lágrima separa la córnea y la conjuntiva de los agentes nocivos del entorno, estos pueden inflamar ambas estructuras y provocar queratitis por el contacto con aguas contaminadas o sustancias tóxicas, así como conjuntivitis irritativas debidas a la exposición a  humos, gases o diferentes productos químicos.

Por otro lado, la polución puede agravar ciertas alergias oculares y aumentar la intolerancia de algunos pacientes a las lentes de contacto, cuyos hábitos de uso e higiene deben ser especialmente cuidadosos para evitar posibles complicaciones.

Ante cualquier malestar en los Ojos es indispensable acudir al oftalmólogo…

Con información de… https://bit.ly/2TOVhWI

jueves, 16 de mayo de 2019

Aparato Lagrimal

O sistema lagrimal es un grupo de estructuras que se encuentra ubicado en la órbita ocular y que es el encargado de la producción o secreción de la lágrima del globo ocular, así como de su distribución por la superficie del ojo y de su evacuación o eliminación hacia las fosas nasales.

La lágrima que se produce en las vías lagrimales, en concreto en las glándulas lagrimales, es un elemento esencial para garantizar el buen funcionamiento del sistema visual ya que lo protege, le aporta nutrientes y oxígeno y lo hidrata. Debemos tener en cuenta que la película lagrimal, además, mejora la calidad visual.

Las lágrimas se producen de forma permanente (secreción basal permanente) y esta producción puede aumentar ante agresiones externas (cambios de temperatura, cuerpos extraños y/o motivaciones psíquicas).

El aparato lagrimal es una de las estructuras perioculares anexas de protección del ojo junto a los párpados y la conjuntiva.


El aparato lagrimal está formado por:

El sistema secretor, donde se produce la lágrima. Está compuesto por las glándulas lagrimales basales y las glándulas reflejas. A su vez, las glándulas lagrimales reflejas se dividen en principales y accesorias.

El sistema excretor, por donde se elimina la lágrima hasta las fosas nasales. El sistema secretor está compuesto, entre otras estructuras, por los puntos lagrimales, los canalículos lagrimales, los sacos lagrimales y los conductos lagrimales o conductos nasolagrimales que transportan la lágrima desde el ojo hasta la cavidad nasal, concretamente hasta el meato nasal.

Por otro lado, también tiene una función excretora de la lágrima el músculo orbicular en su porción palpebral, ya que es el encargado de comprimir el saco lagrimal y trasladar la lágrima hacia el conducto nasolagrimal y el meato nasal.


·      Puntos lagrimales: Son los colectores de las lágrimas que se producen en las glándulas y se encuentran situados en la esquina del párpado superior y del inferior.
·      Canalículos lagrimales, canales lagrimales o conductos lagrimales: Los canalículos levan la lágrima hasta los sacos lagrimales.
·      Sacos lagrimales: Los sacos lagrimales conectan los conductos lagrimales con los conductos nasolagrimales y bombean la lágrima.
·      Conductos nasolagrimales: Los conductos llevan la lágrima hasta la cavidad nasal para la eliminación del líquido, muchas veces a través de la nariz.

Información de https://bit.ly/2Vjc3sW

lunes, 13 de mayo de 2019

Síntomas y causas del Glaucoma

El glaucoma es una enfermedad neurodegenerativa que se caracteriza por el daño en el nervio óptico secundario provocado, en un alto porcentaje de los casos, por el aumento de la presión intraocular. 

El deterioro progresivo de las fibras del nervio suele conducir a la pérdida del campo visual y, en las situaciones más graves, a la ceguera.

Entre las principales causas está que el paciente sufra una presión intraocular (PIO) elevada, aunque en la aparición de esta patología ocular también pueden intervenir otros factores. 

De hecho, las personas con mayor riesgo de padecer glaucoma son los pacientes mayores de 60 años, los parientes de pacientes con glaucoma, las personas diabéticas, los pacientes que toman esteroides de manera prolongada y las personas con presión intraocular elevada (hipertensos oculares).


Para entender el proceso de aparición del glaucoma resulta esencial conocer el funcionamiento del sistema visual. 

La cámara anterior y la cámara posterior del ojo son dos espacios separados por el iris y conectados por la pupila que están llenos de un líquido transparente denominado humor acuoso. 

El equilibrio entre la producción y la eliminación del humor acuoso determina que la presión intraocular se mantenga dentro de los límites adecuados, que los especialistas suelen estimar entre 12 y 21 milímetros de mercurio (mmHg). 

En la mayor parte de los casos de glaucoma, el sistema de drenaje del ojo no funciona correctamente y el exceso de humor acuoso no se elimina adecuadamente, lo que provoca que el aumento de la presión intraocular que daña el nervio óptico llevando a la pérdida de la visión.

Las formas más comunes de glaucoma no suelen presentar síntomas, ya que la pérdida de visión se produce de forma muy lenta y suele afectar primero a la visión periférica (lateral). 

En las variedades menos frecuentes de glaucoma los síntomas pueden llegar a ser severos e incluyen:
·      Visión borrosa
·      Dolor de ojos y dolor de cabeza
·      Náuseas y vómitos
·      Aparición de halos alrededor de las luces brillantes
·      Pérdida repentina de la visión


La ausencia de síntomas previos asociados en los pacientes de glaucoma lleva a que los especialistas recomienden revisiones periódicas con mediciones de la presión intraocular, en especial entre los pacientes que se encuentren en grupos de riesgo. 

La pérdida de visión provocada por el glaucoma es irreversible en la mayor parte de los casos, pero si la enfermedad se detecta a tiempo y se siguen las pautas del especialista se puede llegar a frenar esa pérdida visual.

Con información de… https://bit.ly/2S18qqd


jueves, 9 de mayo de 2019

Después de una cirugía ocular, ¿puedo viajar en avión?

Tras algunas intervenciones oculares, y debido a los cambios de presión a los que nos sometemos al volar, coger un avión puede afectar la visión. Cada intervención tiene sus riesgos y, por ello, se deben de respetar siempre los consejos que pueda ofrecernos nuestro oftalmólogo y, en caso de duda, siempre debemos contactarlo.


¿Puedo volar tras una operación de retina?

Tras un desprendimiento de retina, el oftalmólogo puede aconsejar la realización de una vitrectomía. Esta prueba consiste en substituir el humor vítreo por una burbuja que puede ser de gas, silicona o aire.

En el caso de que se coloque una burbuja de gas, es importante no volar hasta tener la conformidad del oftalmólogo. La burbuja de gas podría expandirse a causa de los cambios de presión durante el vuelo, y esto, podría acarrear graves consecuencias para el ojo. Se debe pues, esperar a que el oftalmólogo confirme que la burbuja de gas ha desaparecido para poder volar.

Tras un desgarro en la retina, es probable que deba someterse a una intervención con láser para reparar la retina. Esto no debería suponer un problema para volar en avión. De todos modos, un desgarro en la retina puede suponer que se le inyecte líquido o gas en el ojo. En estos casos, el oftalmólogo debe darle su aprobación antes de tomar un avión.

¿Puedo volar tras un trasplante de córnea?

En los casos de trasplante de córnea donde se inyecte una burbuja de gas o aire, no se podrá volar hasta que esta haya sido reabsorbida y el oftalmólogo confirme que todo está en orden.

¿Puedo volar tras una cirugía refractiva?

Por lo general, no hay ningún inconveniente en viajar en avión tras este tipo de cirugía, ya que las intervenciones con láser, no se ven afectadas por los cambios de presión que se producen durante el vuelo. Normalmente, entre 24h y 48h después de la intervención, el paciente recupera la visión y puede volver a hacer vida normal. En caso de duda, deberá consultar a su cirujano oftalmólogo.



¿Puedo volar tras una operación de glaucoma?

En general, no hay problema en que vuele 24h después de haberse sometido a una Iridotomía periférica con láser (IPL), a una trabeculoplastia o a cualquier otro tipo de cirugía para el glaucoma. De todos modos, siempre debe tener el visto bueno del oftalmólogo.

¿Puedo volar tras una intervención de cataratas?

En principio, no acostumbra a haber impedimentos para volar tras una cirugía de cataratas. Sin embargo, es importante que el oftalmólogo confirme que todo está en orden y, el paciente debe seguir los consejos y controles postoperatorios que se establezcan.

En caso de que la intervención haya sido complicada, puede viajar en avión sin problemas, a no ser que se le haya colocado una burbuja de gas o aire durante la operación. En este caso, deberá esperar a que su oftalmólogo le confirme que puede volar.

Otros tipos de intervención ocular

En principio, no hay contraindicación para volar en la mayoría de casos tras una intervención en la parte exterior del ojo o del párpado (blefaroplastia, cirugía del pterigion u otras cirugías externas del ojo).

Eso sí, se deben seguir siempre las instrucciones establecidas por el oftalmólogo, debe mantenerse una buena higiene del ojo y debe evitarse que el ojo y la herida se sequen durante el vuelo.

Si durante el vuelo, presentara síntomas como ojo rojo, visión borrosa, moscas volantes, dolor ocular intenso o fotofobia, deberá consultar urgentemente al oftalmólogo.

Información… https://bit.ly/2vKCtcx

miércoles, 8 de mayo de 2019

Terapia visual


Se conoce como terapia de la visión, entrenamiento visual, entrenamiento de la visión o simplemente "EV".

Otro nombre que a menudo se asocia con la terapia visual es la "ortóptica". Este término, que literalmente significa "enderezamiento de los ojos", se remonta a la década de 1850 y se limita a las técnicas para el entrenamiento de los músculos del ojo con el fin de enderezar estéticamente los ojos que están desalineados debido al estrabismo.

La ortóptica puede ser muy eficaz y es un tipo de entrenamiento visual; sin embargo, el término "ortóptica" no es sinónimo de "terapia visual", la cual describe una gama más amplia de técnicas que se utilizan para tratar una variedad más extensa de problemas de la visión.


Además, si bien el énfasis de la ortóptica es sobre la musculatura óptica y la alineación de los ojos (al menos estéticamente), la meta de la terapia visual es optimizar todo el sistema visual, incluyendo los ojos y las áreas del cerebro que controlan la visión, la percepción visual y otras funciones relacionadas con la visión. Al tratar todo el sistema visual, la terapia visual pretende cambiar comportamientos reflexivos (autónomos) para producir una cura duradera.

En muchos casos de estrabismo, la terapia visual puede ser una mejor opción de tratamiento que la cirugía. En otros casos, puede ser una terapia auxiliar beneficiosa, antes y después de la cirugía, para aumentar la probabilidad de un resultado satisfactorio.

Optométrica

La mayoría de las terapias visuales que se realizan en los Estados Unidos están prescritas y supervisadas por un optometrista. Por ese motivo, también se llama terapia visual optométrica.

Los optometristas que se especializan en terapia visual, particularmente aquellos que además se subespecializan en visión infantil y en el desarrollo de la visión, se llaman optometristas pediátricos, optometristas del comportamiento u optometristas del desarrollo.

Información… https://bit.ly/2VSUalT